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13/01/2022 - 16:14

Preocupación. Gestión de Riesgo, Searpi y el Sedcam se trasladaron a las comunidades afectadas en el lado Este del Departamento.

Santa Cruz 13 enero 2022.-  Con el fin de conocer a profundidad los daños que dejaron los desbordes de ríos en diferentes zonas del departamento, la Gobernación cruceña desplazó su equipo técnico a las comunidades afectadas en el municipio de San Julián.

Representantes de la Dirección de Gestión de Riesgo, del Servicio de Encauzamiento de Aguas y Regularización del Río Piraí (Searpi) y del Servicio Departamental de Caminos (Sedcam), que conforman los brazos operativos de la Gobernación, llegaron hasta la comunidad Mandarino e Illimani en San Julián, para conversar con los pobladores del lugar y ver posibles soluciones a los desbordes.

 

Jhonny Rojas, coordinador del Comité de Operaciones de Emergencia Departamental (COED) por inundaciones, indicó que se está trabajando con los técnicos tanto de la Gobernación como de la Alcaldía de San Julián para buscar solución al problema. “Hemos hecho una inspección con el Searpi con la Alcaldía con los comunarios obviamente viendo la magnitud del desastre del Río que ha habido en este sector. La verdad que de acuerdo a las imágenes que nos presentaban es muy muy complicado, muy difícil la situación”, manifestó.

El COED realizará la atención en merito a las posibilidades económicas con recursos de emergencia. Es por ello, que se inspecciono el área afectada del sector Mandarino, evidenciándose la afectación en los defensivos existentes y cultivos situados en las riberas del Rio Grande (servidumbre ecológica).

 

Asimismo, Ricardo Arana, Director del Searpi, expresó su preocupación por la situación en el lugar, considerando que a decir de los comunarios existen otras zonas más afectadas por el desborde del río.

Arana mencionó que en el lugar no se podrá hacer arreglos con tapones o bolsas de arena, sino que se deben realizar trabajos estructurales y que para ejecutar las obras estructurales la inversión significará millones de bolivianos. “Estamos hablando del punto menos atacado de toda la zona, porque hay lugares a los que no hemos podido llegar porque los caminos son inaccesibles y dice que la situación es mucho más crítica en otros cuatro puntos. Ahorita hacer tapones en esta zona va a ser una solución que se la va a llevar la primera riada que vuelva”, advirtió a tiempo de recordar que la época de lluvia en el departamento está empezando y prevé que culmine a finales del mes de marzo.

“Aquí se necesitan hacer obras estructurales para que aguanten la próxima riada y esperemos que se puedan realizar con la ayuda tanto de la Gobernación que seguro lo vamos a conseguir a pesar de que sabemos que la Gobernación se le han recortado últimamente sus recursos que estaban planificado en el POA, pero vamos acudir al Gobierno central para conseguir el apoyo de ellos”, puntualizó Arana.

Cabe resaltar, que el Municipio de San Julián en coordinación con el SEARPI, inició los trabajos de prevención el pasado mes de agosto con la ejecución de defensivos hasta el inicio de las crecidas de los ríos, siendo los mismos insuficientes, dada la magnitud de las riadas (históricas por 7 días consecutivos).

 

Por su parte, Luis René Hurtado, poblador de la Comunidad Illimani, lamentó que la época de lluvia haya provocado desborde de ríos y esto a la vez la pérdida de sus cultivos de soya, maíz y arroz que hay en la zona. “Venimos peleando con el embate de la naturaleza durante varios meses y todo este tiempo de agua hemos venido luchando de los cuales no hemos podido sostener el golpe de agua y como se ve todo nos rebasó”, dijo.